jueves, 9 de febrero de 2012

Nonotzalistli

Ruy Pérez Tamayo acotó certeramente lo siguiente en un programa de tvunam: “Los actuales políticos están preocupados por las elecciones futuras y no existe ningún estadista que esté pensando en las generaciones futuras”.
Efectivamente no podemos poner la expectativa luminosa en el pensamiento de un actual político para que resuelva grandes retos que requiere el país. No es un político el que llevará a cabo esta tarea. No esta clase de político. Como en la iglesia no será tarea de ningún mesías venir a resolver los problemas de los creyentes. Es un asunto de todos y cada uno de nosotros. En otras palabras: cada quien tendrá que ser su propio mesías, su propio mensajero, investigar dentro de sí mismo qué es lo que anhela para sí y los prójimos.
La pugna, el revanchismo, la afrenta, la competitividad es lógico que proceda del capricho, de la codicia, de la ambición de poder. Todo eso se resume en griterío, en violencia sutil e hipócrita. Los candidatos simulan hasta el hartazgo rostros de paz inexistente, de buenas intenciones, pero no es cierto, sus rostros son una cáscara de la decadencia de un mundo que ya no puede ser posible. Todos quieren ser escuchados por lógica, todos quieren su oportunidad, pero en un mundo de guerra (porque las elecciones son eso: una guerra, sucia o más sucia porque no hay guerra limpia, la guerra en sí es inmunda) nadie escucha a nadie, todos quieren poseer la verdad y el triunfo electoral será de aquel que grite más fuerte o corrompa más gente o en efecto convenza a los millones de ciegos y sordos de tanto grito y propaganda, de tanta confrontación. En cambio cuando los seres han logrado la paz interior no discuten, ni gritan sino que escuchan, dialogan con la otra parte y resuelven. Esa es la propuesta de México Nación. Nuestros abuelos mexicas le llamaban Nonotzalistli al hermoso don y acto de platicar, razonar, dialogar.
Imaginen que hemos sido arrasados por una hecatombe de la naturaleza y que nos hemos quedado sin hogares, sin carros, sin electricidad, sin centros comerciales, sólo solos y con nosotros mismos, sin nuestras banderitas tricolores, blanquiazules, amarillitas o negras o moradas; solos y frente a nuestras miserias donde esa tragedia nos hace idénticos, no hay polancos, no hay tecamachalcos, ni los pinos ni tepitos ni las villas guadalupanas ni las del valle , ni perisures, ni satélites, sólo ruinas sobre ruinas, piénsense así porque así estamos. Debemos limpiar nuestras ruinas personales y construir juntos. Sé cuán difícil es esto. Hay millones de seres con intereses rancios por defender, posiciones y posesiones económicas envidiables entre ellos y tener paz para el bienestar de todos es algo que les interesa tanto como un pepino le interesa a un león. Su paz es su poder económico, político y el bienestar de los otros más bien les suena a malestar y en ello se afanan por mantenerlo con todo su poder y recursos inmorales. Los tiempos actuales les exigen un discurso nuevo, de moralidad y hasta de amor pero no les es propio hablar de ello, no son las bocas adecuadas para proferirlo. Requieren ese discurso para sobrevivir porque los parásitos eso hacen, se adecúan, se filtran, simulan y ya en el poder a sus anchas someten y siguen siendo aquellos hilachos de conciencia desnutrida con intenciones de seguir sometiendo y enriqueciéndose.


Supremo Consejo de Gobierno

¿Por qué un concejo y no un presidente?
Ya lo hemos dicho en nuestros documentos. Los Concejos serían la voz de todos. Cederle el poder a una sola persona es echarlo a perder como persona, todos terminan viciándose, corrompiéndose y lastimando a la nación. En tiempos prehispánicos era diferente. Los cargos o puestos públicos les correspondían a los exactos, a los correctos, a los que por correspondencia tenían la capacidad de estar en ese sitio y esa capacidad se las daba su signo o Nahual, su posicionamiento cosmogónico en este lugar y tiempo. En el mundo maya se aplicaban los 20 nahuales de la configuración cosmogónica (Toj, Tzi, Q’Anil, Kej, Keme, Kan, K’at, Aq’ab’al, Iq’, Imox, Ajpu, Kawuq, Tijax, No’j, Ajmak, Tz’ikin, I’x, Aj E, B’atz’) para este mundo y los hombres sabios del supremo consejo de ancianos estudiaban el nahual de los nacidos para tal o cual cargo y no se equivocaban porque la esencia no engaña. La esencia actúa con concordancia para lo que está destinada al encarnarse en cada ser. Hoy por hoy las esencias de los seres están sumamente contaminadas y todo camina en desorden. Los cargos públicos los posee quien no debiera estar ahí, lo está por recomendación, por parentesco, por corrupción, por dinero, por su hambre personal, por su miseria humana y sí, llegan a hacerse expertos en su área pero lo son de manera corrupta y por supuesto quien lo merece tiene otra colocación en el desorden, quizá esté laborando en una tienda de Oxxo.
Hace muchos años y consultando el misterioso libro I Ching le hice la pregunta obligada respecto a este mundo y me contestó que era el tiempo de los vulgares, que los nobles tenían que replegarse para que aquellos experimentaran, crecieran, aún a costa de sus errores y estupideces y llegaría de nuevo el tiempo para que el noble, con paciencia y sabiduría volviese a orientar al vulgar que de pronto se vio con poder y con aquella supuesta gloria. El vulgar miente por que le abriga su ignorancia, el vulgar corrompe porque le abriga el miedo, el vulgar asesina porque desconoce todo respecto a la vida y al respeto. El vulgar merece aprender y es para el noble un honor concederle la oportunidad. Esa oportunidad ya llegó a su fin y los que aprendieron la lección bienvenidos y los que no: Guarden silencio, escuchen y aprendan. El tiempo de los vulgares, de los necios ha concluido. Que aunque hermosamente ataviados no son sino personajes grotescos que odian, que ambicionan desmesuradamente. Su ambición es miedo. Eso es. La codicia, el crimen son eso, simple miedo a la libertad. Miedo a crecer, miedo a la sabiduría.
Dentro de la espiritualidad maya, el hombre tiene ideas pero no sabiduría. Por eso, es importante juntarse en consejo para unir ideas y formar así una ciencia. En el reino del Anáhuac se le llamaba Nezentlaliztli, acordar en concejo. Sin gritos, sin caprichos, sin ofensas, sin trampas porque todo eso se vierte contra sí mismos dando inicio a una interminable secuela de causas y efectos dañinos.

En el mundo mexica todos éramos espejo (tezkatl) de todos. Un Supremo Consejo de Gobierno es la herencia que tenemos de nuestros ancestros, como hemos asentado en nuestros documentos. Este consejo debe ser la extensión del individuo común, del Macehual. Siglos estuvieron excluidos él y su familia (chanekeh), cuando deben de ser la base del Kalpulli.
Un Consejo Supremo de Gobierno debe estar conformado por hombres y mujeres honorables (Mauiztiloni), gente que conozca y practique el respeto (Teixtiliztli,), gente sabia (Tlamatini), que ame a su pueblo (Tlazotlani) ya que ellos son el pueblo mismo, de ahí proceden.
Aquellos, los ruines, los Vulgares, los educados para escupir (Chichaliztli ), para destrozar (Ixpoloaliztli), para robar (Ichtekiliztli) a la patria, a sus hermanos, deben aprender ahora de lo que es un Principio accionando, de la fortaleza de ese Principio, del alcance sin límites. México desde que fue víctima de la conquista ha venido cargando con vicios terribles de ambición, pareciera una madición interminable de los devoradores de oro, ese oro ya no sirve, nunca ha servido sino para atavíos antiguos, el oro es sólo un metal que brilla pero las almas brillas más cuando se afinan. Mexicano, mexicana, escúchame, no te hundas en esas herencias que no eres eso. No perpetúes la barbarie, No perpetúes el engaño, No perpetúes el soborno, No perpetúes la mentira y todos esos vicios.

Les invitamos al silencio interior para que escuchen ya no aquel ruido que les llevó a hacer tormentas para que no se escuchasen la voz de los otros sino escuchar la conciencia accionando. La potencia de la Libertad, del Respeto, de la Humildad y tantos y tantos Principios desconocidos para él y ella.

Mexicano, Mexicana...

¿Está usted capacitado (a) para organizarse en su barrio, colonia, poblado, escuela, trabajo?
¿La historia de corrupción, mentira e injusticia no le ha proporcionado el hartazgo para tener esa capacidad?
¿Acaso acudirá usted a las urnas este 2012 con la esperanza de que ahora todo cambie? No sea usted estólido (a), ni ridículo (a), ese tiempo ya se fue, no corresponde a la altura de estos tiempos. ¿O acaso es usted un sujeto o sujeta manipulada por su sindicato, grupo o partido al que debe rendirle pleitesía y apoyarlo en aras de miserias bajo el nombre de remuneraciones o prestaciones? ¿Qué país quiere usted heredar a los que vienen detrás, que a decir verdad es usted mismo? Reconsidere lo que hemos escrito en este blog, no es con afán de hacerlo enfadar o reñirle o burlarnos incluso de su agrupación política, no, simplemente queremos hacer que la Nación tome el cauce necesario para lograr la justicia social, es decir el bienestar para todo habitante de esta nación lastimada por la indiferencia de los unos hacia los otros. Piense en que no soy su enemigo sino su hermano, su contemporáneo de condiciones de vida. Su contemporáneo de vida.
No pretendo enredarlo en ideologías, nada tengo que venderle ni robarle. Soy un ciudadano que se ocupó de sus asuntos y preferencias de vida, muy alejadas de la vida política, un sujeto que creyó erróneamente que era obligación del político hacer el trabajo de construir la nación como expertos en lo suyo y yo, como usted hacer lo nuestro en nuestras áreas pero muchos no cumplieron con su deber y ahora esto es un caos. El panadero cumple con hacer su pan, el taxista con llevarle al sitio que se le indique, el músico con hacer su música pero la realidad económica hace que panadero, taxista, Juan pueblo y chana flores vivan en condiciones inapropiadas de vida. Yo no soy un experto en política ni lo pretendo…simplemente soy alguien fastidiado de los políticos expertos en ellos mismos, en sus intereses malsanos y egoístas y que de gobernar nada saben….no saben siquiera hacerlo consigo mismos cuando los escuchamos vociferando entre ellos y contra quienes se les opongan. Deje de poner sus expectativas en gente que usted desconoce y que ellos a su vez desconocen. Es tiempo de confiar en usted y en los afines a usted mismo, quienes somos muchos. Muchos no tenemos partido porque no somos de partidos sino de integraciones. Ya no es el tiempo de retar ni combatir contra el otro en nombre de una camiseta sino de retarnos a nosotros mismos en aras de lo nuevo, de la integración humana. No es tiempo de jugar a quien vencerá en el campeonato sino todos ser vencedores, es tiempo de jugar por el placer de jugar no de competir. La idea de triunfadores con liderazgo y de perdedores es una idea vil de Norteamérica que habla de su fracaso como sociedad inarmónica, egoísta y soez. Nacer es un triunfo, sostenerse en la vida debe serlo también. Todos tenemos el derecho de ser felices, eso nos hace idénticos. Todos debemos de apoyarnos, tenemos la capacidad de la inteligencia. Así es que piénselo, cambie de actitud, ponga a trabajar su mente que para ello está en usted y proponga, que nadie aquí es experto en política, aunque sí, con una nueva ética ascenderemos al triunfo de una Ética para las ciudades.